miércoles, 29 de julio de 2015

El Buscon

"No mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y costumbres". Así termina El Buscon y así empezó esta cabeza mia a caminar.  Mudar de lugar no he mudado pero si de vida y costumbres de la mano de Quevedo.

A esta compañiá le gusta fabricar local para venta global, como los chinos, o eso se intenta vender, la venta, una cuesta de casi 89° de inclinación.
¡Ay! La programación  si fuera tan fácil como la creación otra gira cantaría. 

La creación al igual que ser programados en un teatro te pilla como las musas, trabajando. Trillando cada rincón español, americano o europeo siempre hacia fuera, excéntrico y explosivo, sin embargo la creación viene como la roña al tobillo, que andando andando se va creando la costra necesaria y al final la tienes tan cerca que sin darte cuenta surgio de la nada, pero sin movimiento no cuaja y sin  maestría se corta como el ajo aceite. Así sin más con un una novela con más de cuatrocientos años y un Juanma Cifientes tan actual como el ihpone 6, capaz de desenmascarar al mismísimo Escamilla o Alonso Álvarez ¡que vete tu a saber quienes eran esos! Te pone en pie a fuerza de disciplina al mismísimo Lázaro bailando treinta y seis folcloricos pasos  al son de una sola voz la de Don Pablos. A fuerza de darle a la pata en una cinta estática en medio del desierto llegas a un oasis sin cambiar de lugar pero si de pensamiento.